PUERTO PLATA.- La prolongada sequía que se registra en nuestro país ha ocasionado la desaparición de los principales ríos y otras fuentes acuíferas ubicadas en la parte suroeste de la provincia de Puerto Plata, acarreando daños considerables a la producción agropecuaria y causando un marcada déficit de agua potable para el consumo humano.

Según los datos suministrados por el periodista Fausto Morrobel Peña, los ríos Bajabonico y Caonao, que recorren parte del territorio del municipio de Luperón y el Unijica, que desemboca en las proximidades de la Isabela histórica, sus causes ha sido afectados sensiblemente por la fuerte sequía que agobia al país, mientras que arroyos, cañadas, lagunas y norias, también se han secado por la falta de lluvias.

Esta situación, está generando graves inconvenientes a la agropecuaria, a la flora y la fauna; así como a la población humana de esa zona ya que según afirmaron el presidente de la Federación de Asociaciones de Ganaderos del Norte (FEDEGANORTE); ingeniero Adalberto José Brito (Cley), así como el productor agropecuario Frank Ortega Brito, la fuerte sequía por más de 14 meses ha arruinado por completo la ganadería y la agricultura en las poblaciones de la parte oeste de la provincia de Puerto Plata.

De igual manera varios productores de esa región, afirmaron que además de la sequía, también la deforestación y la operación de varias granceras, han sido las causas principales de que se encuentre secos todos los ríos que de la zona suroeste de Puerto Plata, como son el Bajabonico que es la fuente acuífera de mayor proporción de esa jurisdicción, además de los ríos Caonao y Navita, en tanto que otros afluentes lucen con un caudal notoriamente reducido como son los ríos Unijica y el Lorán, cuyas aguas ya casi no se ven en la superficie.

Asimismo, “se encuentran en polvo” las lagunas existentes en casi todas la comunidades ganaderas del municipio de Luperón además de que también están secos los arroyos, cañadas y pozos tubulares, estos últimos construidos por los productores con la finalidad de ponerle agua al ganado, pero debido a la sequia el nivel freático prácticamente ha desaparecido amenazando de manera peligrosa a la población, además de los animales y la vegetación que luce completamente marchita por “la seca”.